La regulación de la temperatura de la cosecha utiliza el principio de inmersión y el escurrido tangencial dinámico: la cosecha se pone a remojo en un baño de mosto como fluido térmicoy se escurre en tambores que permiten su transferencia.
Toda la cadena de tratamiento está controlada por un autómata programable que garantiza la regulación de la temperatura a la salida de la cámara de calefacción según el tipo de vinificación elegido (MPC: 72°C, flash distensión: 85 °C).
La interfaz táctil sencilla e intuitiva permite al operario controlar los distintos parámetros de funcionamiento (temperaturas, tiempo de maceración) e informa al operario del estado de Gulfstream.